Crea tus propias preguntas tipo test
Una de las técnicas de memorización que suele ser muy eficaz es la preparación de tarjetas de memoria, con las cuales además podremos preparar nuestros propios test de repaso.
Son tarjetas que se usan para adquirir conocimientos al memorizar su contenido.
Se puede usar tanto tarjetas físicas en papel, como digitales.
Si usamos el papel, en el anverso o lado A de la tarjeta escribimos una pregunta y por el reverso o lado B anotaremos la respuesta correcta.
Se trata de un método de estudio que requiere una participación activa, en primer lugar tendríamos que realizar preguntas relativas al tema que estemos estudiando en cuestión así como sus respectivas respuestas.
Una vez confeccionadas las tarjetas nos iremos preguntando el contenido de las mismas a lo largo de nuestro estudio de manera recurrente, cada vez que contestemos correctamente la tarjeta iremos espaciando cada vez más esa tarjeta en cuestión, de manera que se va fijando en la memoria.
Podemos organizar las tarjetas dos cajas, una para las que respondemos correctamente y otra para las que todavía no aprendimos. De manera que repasaremos las que fallamos en un lapsus de tiempo menor que las que ya nos sabemos
Como cualquier técnica de memorización las tarjetas de memoria son complementarias en nuestro estudio. Para evitar dedicar demasiado tiempo a la elaboración de las tarjetas, podemos marcarnos un número concreto o bien realizarlas sólo en aquellas cuestiones más importantes o las que nos resulten más complicadas de memorizar.
Mientras más trabajemos un tema en concreto más fácil será retenerlo en la memoria.
Os animamos a que probéis esta técnica y a que juguéis con ella, pídele a tu pareja, un amigo/a, tus padres… que te haga preguntas al azar, o de un determinado tema.
Si logras que el estudio te resulte ameno y divertido, afianzarás los conocimientos de una manera más eficaz. Jugar tiene este efecto.
A jugar!!!!